Gastronomía de Burgos

Gracias a su geografía con gran variedad de climas y altitudes la provincia de Burgos genera gran abundancia de de productos diversos derivados de su cuidada agricultura, ganadería y el mantenimiento de costumbres como la caza y la pesca.

Burgos goza además de una reconocida gastronomía que lleva su apellido por toda la geografía española, como la morcilla y el queso ,los más populares,  y de las que se pueden disfrutar además de diferentes variedades autóctonas. Junto con ellos el lechazo, asados y pucheros atraen cada vez más adeptos a las cocinas de los restaurantes de la ciudad.

En la capital se pueden degustar productos de toda la geografía burgalesa como la carne de las Merindades que se produce en una comarca con 26 pueblos del valle del Ebro o las deliciosas hamburguesas de carne de potro Hispano –bretón, junto con las variedades del vacuno o lechal de la zona de la Bureba o Sierra de la Demanda.

Como complemento de un buen asado tenemos la lechuga de Medina de Pomar y otras variedades de la zona del norte de Burgos que se cultivan en plantaciones o invernaderos acogidos a su certificación de calidad.

No podemos olvidar las legumbres, base de la dieta mediterránea, con la magnífica alubia de Ibeas y el caparrón de Belorado con piel muy fina y que se elabora lentamente con una pizca de grasa. Célebre es la denominad “ olla podrida” que compone con estos productos un plato recio y suculento.

Para la guarnición de estos platos no puede faltar la patata de Burgos, de recolección tardía de las vegas de los ríos Arlanzón o Tirón, sin desdeñar las del glorioso río Duero.

Pan y vino como alimentos esenciales, complemento perfecto de estos productos de la tierra. En Burgos la torta de Aranda es un manjar, regada con los vinos denominación de origen de Arlanza o Ribera del Duero, dos comarcas vitivinícolas consolidadas en los mercados nacionales e internacionales. Ambas cuentan con el control y garantía de sus denominaciones de origen correspondientes.

A esta oferta gastronómica se suma una cocina en miniatura que elaboran restaurantes, bares, cafeterías, tabernas y mesones que nos tientan en sus barras con una atractiva selección de tapas, pinchos, raciones o cazuelitas. Sobrada justificación para una sabrosa escapada gastronómica.

Estas son solo algunas razones por las que Burgos se convierte en “Ciudad Creativa de la Gastronomía”, corazón de la provincia para poder deleitarse con estos manjares.